Día mundial de la actividad física
Hoy, 6 de abril, se celebra el día mundial de la actividad física en todo el mundo como parte de una campaña por una vida saludable y mejorar las condiciones y calidad de existencia de las personas. Para los pacientes con diabetes es, además, una oportunidad especial para fortalecer esa parte clave del tratamiento que es el ejercicio físico. Como continuidad con las propuestas de los últimos meses, les traemos nuevas propuestas para que empiecen a ejercitarse hoy mismo.
Aunque el calor está cediendo en nuestro hemisferio, aún es importante regular el horario de moverse. Si los días son muy húmedos o calurosos, es preferible ejercitarse en la mañana, que además favorece al metabolismo. Sobre todo, al aire libre.
La actividad física es esencial para estabilizar los niveles de un paciente con diabetes, pero recordá siempre controlar la glucemia antes de empezar. Como explican el profe Nicolás Arce y la profe Cecilia Modi, los valores marcan lo que nuestro cuerpo precisa: si la glucemia está muy alta (250 mg/dl y hay presencia de cuerpos cetónicos) no deben realizar actividad física y deben comunicarse con su equipo médico. Si la glucemia está en rangos normales (70 – 140 mg/dl) sería conveniente realizar una colación (siempre hablarlo previamente con la o él nutricionista); y si la glucemia está en 70 mg/dl o menos, no recomendamos hacer actividad física.
Un tip que suele olvidarse, pero es preciso recordar: si se usa insulina, debe evitarse trabajar el grupo muscular donde se la ha inyectado (se absorbe más rápido y puede bajar demasiado la glucemia).
La glucemia debe volver a controlarse unas horas después de terminar, ya que el efecto de la actividad física continúa. Para evitar descompensaciones, es bueno tener a mano caramelos, un jugo o azúcar en caso de que la glucemia baje mucho. Algunas señales de malestar a tener en cuenta: náuseas, mareos, dolores de cabeza o cansancio anormal son síntoma de agotamiento por calor o actividad intensa. Si esto sucede, se debe interrumpir, beber abundante agua y descansar en un lugar fresco. Si los síntomas continúan, es fundamental consultar a un médico rápidamente.
Como siempre decimos, lo más importante es hacer actividad física en un modo sano y confortable. Ropa cómoda, calzado adaptado que no nos lastime y abundante hidratación. Hoy, 6 de abril, es el día para empezar: ¡a moverse!